domingo, 1 de abril de 2012

Imágenes Tradicionales de Semana Santa

        “LA SOLEDAD” NO ESTÁ SOLA EL VIERNES SANTO

     En estas fechas, las Cofradías de Almería trabajan concienzudamente para que sus pasos salgan a la calle con el máximo esplendor y solemnidad que la han hecho merecedora de ser declarada  de Interés Turístico. Todo un año trabajando  para que las imágenes y los tronos brillen en su recorrido por las calles de Almería al clamor de las saetas, acompañadas durante todo el recorrido del fervor popular.

   
         Una de las Cofradías de mayor tradición en Almería y la más antigua, es la popularmente llamada “La Soledad”.

  
   La fundación de la Cofradía de La Soledad, data de 1768, estableciéndose en 1773 en la Parroquia de Santiago , en tiempos del Obispo Sanz y Torres. Siendo su fundación definitiva en el año 1786.
    La imagen de la Virgen,  “Nuestra Señora de Los Dolores”, y titular de la Cofradía, era una imagen de vestir. Los señores de Barbarín en 1835, le regalaron un manto de terciopelo negro bordado en hilo de oro, con tres esmeraldas prendidas, que fue restaurado en 1925 por las Madres Adoratrices de Almería. También los marqueses de Torre Alta, regalaron a la imagen de la Virgen, en 1856, la magnífica diadema de oro.

La imagen lamentablemente fué destruida en la Guerra Civil. Sin embargo, tanto el manto como la diadema, fueron las únicas joyas que se salvaron tras la desaparición de la imagen en la Guerra Civil. Constituyendo para la cofradía por esta circunstancia, un conmensurable valor sentimental. Estas  únicas joyas que se salvaron, siguen procesionando en la actualidad con el paso de la Virgen, para orgullo de sus cofrades y disfrute de los ciudadanos y  visitantes que eligen Almería para pasar los días de la Semana Santa.

    La imagen, estaba atribuida por algunos autores al imaginero murciano Francisco Salcillo, y para otros al insigne escultor de la escuela granadina José de Mora, pero según las características estilísticas de los tipos de dolorosas de ambos autores,  encaja más en los modelos de Dolorosas realizados por el autor granadino, José de Mora, que  los del autor murciano. 

    La Virgen ,  poseía un bello rostro dolorido, transmitiendo un dolor hondo y amargo exteriorizado con lágrimas. A través de su cara amarillenta y llorosa, de sus tristes ojos y boca de amargura, quedaban plasmados los “Dolores” de una “Madre”, tras sepultar a su “Hijo”.

     La imagen, que se encontraba en un total recogimiento interior, con las manos torneadas y rostro ovalado abatido por un dolor callado en sus ojos, la cabeza levemente inclinada hacia un lado, cejas en leve curvatura y mirada baja, dejaba vislumbrar una bella obra y sin lugar a dudas una de las imágenes más sobresalientes de la Semana Santa Almeriense.

    Con la destrucción de la imagen en la Guerra Civil, la Semana Santa, quedó privada de uno de las Vírgenes más bellas y devocionales que conformaban los desfiles procesionales. La Virgen posteriormente, se reconstruirá, siguiendo el modelo antiguo, por el escultor madrileño José Ortells en 1940, para seguir brillando por las calles de Almería.

     La Soledad, está situada en una de las iglesias  más antiguas y de mayor riqueza histórico-artística que posee la ciudad: la iglesia de Santiago, declarada en 1931 Monumento Histórico-Artístico Nacional. Datada de mediados  del siglo XVI,  forma parte de las iglesias que se empezaron a construir durante el período de cristianización experimentado en la ciudad, tras la toma  por los Reyes Católicos en 1489. Anterior a la iglesia existía la ermita de Santa Lucía, y cuando se empezó a edificar el templo, la portada de dicha ermita quedó integrada en el  mismo, formando parte de una de las capillas más sobresalientes de Santiago, por su exquisita y artística decoración renacentista.  Es precisamente en esta capilla de Santa Lucía donde luce durante todo el año la imagen de “La Soledad”, con su fina y bella fisonomía, esperando ese día grande del Viernes Santo para salir a la calle y  ser vitoreada por todos los almerienses y visitantes durante su recorrido por las calles del centro histórico de la ciudad. Las saetas, durante su desfile procesional, se repiten sin cesar vibrando en la noche, acompañando  la Soledad y Tristeza de la Virgen.

    El Paso de la Dolorosa, va a acompañado con otro Paso de reciente creación.  Es el perteneciente al monumental  conjunto de San Juan Evangelista, que representa a San Juan  acompañado de Nicodemo y Las Santas Mujeres, tras enterrar a Cristo.

 La Cofradía más antigua de la ciudad, espera con ansiada ilusión la salida de “La Soledad” del  templo de Santiago cada Viernes Santo, al clamor de las saetas.  Su paso por las calles estrechas y típicas del centro histórico con total devoción y recogimiento, hacen que está Procesión, sea una de las preferidas y más esperadas por los almerienses en Semana Santa, como así ha sido desde su creación allá por el siglo XVIII.

ESPEREMOS QUE EL TIEMPO DEJE DESFILAR A LA SOLEDAD POR ALMERÍA ARROPADA POR SUS FIELES.


María Isabel García Sánchez. Licenciada en Historia del Arte

sábado, 24 de marzo de 2012

EN VIERNES SANTO AL CRISTO "SE LE ESCUCHA"

                                               EL SANTO CRISTO DE LA ESCUCHA

   
    El Cristo de la Escucha se encuentra en la Catedral-Fortaleza, presidiendo la capilla  conocida como la  "Del Santo Cristo de la Escucha" , donde además está el sepulcro del obispo fundador Fray Diego Fernández de Villalán del que era muy devoto. Sobre la aparición de la imagen( de gran devoción entre los almerienses) existen varias versiones, que emanan de la hipótesis y de la leyenda. Una de ellas es la que relató Florentino Castro Guisasola:   tras la toma de la ciudad por los Reyes Católicos en 1489, una familia de Cristianos Viejos, se trasladó a vivir a la casa que había estado ocupada con anterioridad por una familia árabe en los tiempos de dominación musulmana. Los miembros de toda la familia, en el muro de una de las habitaciones  de la casa, escuchaban insistentemente “ESCUCHA”, “ESCUCHA”, por lo que decidieron tapiarla y finalmente se fueron. Al cabo del tiempo llegó  una nueva familia y y de nuevo escucharon la palabra contundente “ESCUCHA, ESCUCHA” , como querían ampliar la casa por la parte donde se escuchaba la misteriosa voz,  derribaron el tabique y finalmente se encontraron  una faz ensangrentada, caída lánguidamente sobre un hombro: era un Cristo que yacía en el muro., de ahí que se le llame “EL SANTO CRISTO DE LA ESCUCHA”

     Ante la imagen primitiva del Santo Cristo, datada entre los siglos XIV-XV, de rostro oscuro, dramático y expirante, se postraba el pueblo almeriense, dedicándole bellos poemas. El Cristo constituía un tradicional Vía- Crucis que salió por vez primera de la Catedral, recorriendo las calles céntricas de la capital en 1929.

    Al igual que ocurriera con las  imágenes de otras Hermandades y Cofradías de gran tradición, el Santo Cristo fue destruido en la Guerra Civil Española, realizando Jesús de Perceval tras la contienda en 1941 una réplica del original. La capilla del Santo Cristo de la Escucha, es la más antigua de la catedral, de finales del gótico y el exterior de dicha capilla es un torreón octogonal donde esta tallado el popular “Sol de Portocarrero”, el emblema de la ciudad.

   El Vía-Crucis del Cristo de la Escucha, es muy esperado por todos  almerienses en Semana Santa, que se congregan en multitud en la Plaza de la Catedral para ver la salida de la imagen a las cinco de la madrugada del Viernes Santo, y acompañarla durante todo su recorrido por las calles del centro de la capital hasta su encierro que se viene haciendo aproximadamente sobre las 8,00h.,

Tras haber realizado el tradicional Via Crucis es algo muy típico que se ha convertido en una costumbre  tomarse en una de las excelentes cafeterias de Almería, una buena ración de churros con un chocolate recién hecho.

martes, 14 de febrero de 2012

CADA 14 DE FEBRERO VUELVE SAN VALENTIN A ALMERIA

                             EL SAN VALENTÍN DE ALMERIA

Antes de empezar este artículo, tengo que nombrar que mis fuentes sobre el mártir San Valentín de Almería , están basadas en las conversaciones que mantuve y el folleto publicado “La Verdad de San Valentín”, escrito por el insigne canónigo archivero de la Santa Iglesia Catedral ya fallecido, D. Juan López Martín y publicado por el Centro de Iniciativas y Turismo en febrero de 1965, año en el que Almería celebró una gran fiesta en Honor a San Valentín y principalmente a los restos del cuerpo del mártir  Valentino que llegaron a nuestra capital y están documentados.

   Haciendo historia, hay que subrayar que San Valentín, Patrón de los enamorados, fue sacerdote de Roma  y martirizado el 11-02-281, bajo el mandato del emperador Claudio II en la Vía Flaminia. Posteriormente a esta Puerta se le llamó Puerta de San Valentín porque el Papa Julio I construyó en su Honor una basílica.  San Valentín fue sacerdote y dedicó su vida a la conversión de los paganos en los tiempos en los que el cristianismo estaba perseguido.  Ayudaba a los cristianos encarcelados, de tal forma que consiguió que el guardián de los mismos Asterius y toda su familia, se convirtieran al cristianismo tras haber curado de ceguera a una de sus hijas. Esta circunstancia fue la causa para fuese llevado ante el emperador y condenado a morir degollado.  San Valentín nació en la ciudad de Terni  y allí se encuentra guardado su cuerpo en una urna de plata maciza construida debajo del altar mayor. El 14 de febrero está instaurado como fiesta cristiana por la iglesia y se conmemora a San Valentín, dándole un sentido cristiano al amor, que después se conocería popularmente como “Día de los Enamorados”

El San Valentín de Almería es un mártir procedente de las catacumbas que se descubren en el siglo XVIII en Roma. Los restos del cuerpo del mártir que llegaron a Almería era uno de los muchos peregrinos que iban a orar a la tumba de San Pedro. Eran cristianos que los martirizaban y los enterraban con una copa de sangre, haciendo alusión a su martirio. En la inscripción del enterramiento figuraba “Valentino In Pace / Pache “(Valiente en Paz). En este sentido cuando en el siglo XVIII se descubren las catacumbas de Roma y se extraen los cuerpos de varios  mártires, se trasladan a diversos lugares, y uno de estos cuerpos llegó a Almería. El San Valentín de Almería, fue sacado del cementerio de San Ciriaco,  el 9 de abril de 1779 y se autentifican las reliquias sagradas en Roma por Fray Nicolás María Sandicio, siendo donadas al Maestro Fray Antonio Gutiérrez  ex asistente general de la Orden de San Agustín quien las entrega con fecha del 15 de octubre de 1781 y cédula firmada en Cádiz  al Arcediano de la Catedral de Almería D.Vicente González. Finalmente en 1782,  D. Francisco Pérez, escribano de la Corte, testificó que entre los bienes del  testamento de D. Vicente González, se encontraba la donación del cuerpo del mártir San Valentín a la Iglesia Catedral. Las reliquias del cuerpo eran sus huesos revestidos de cera, restos que se colocaron debajo del altar de San Indalecio y se expusieron al culto en agosto 1782.

D. Vicente González vivía en una casa mudéjar,  dando a la antigua Plaza del Juego de las Cañas (actual Plaza Vieja), y  esquina con las actuales calle Mariana con Plaza de la Administración Vieja.  Todavía hoy se conservan los arcos de dicha casa. Cuando murió, dejó la casa y testificó que con las cuentas que ello produjera se celebrarían varias fiestas, entre las que se encontraban las del 14 de Febrero (Día del Patrón del Amor) y el día 15 de mayo ( Día de San Indalecio).

El cuerpo estuvo en el Altar Mayor de San Indalecio, hasta la llegada de la Guerra Civil Española, donde D. Pedro Segado que era miembro integrante de la Junta del Tesoro Artístico de Almería, cuyo objetivo era la salvaguarda de los cuadros, ornamentos y otros objetos de la Catedral, aseguraron que aunque la capilla de San Indalecio fue destruida, los restos  del cuerpo de San Valentín no fueron destruidos sino guardados con otros objetos de arte en unas dependencias interiores de la Catedral. Por otro lado el insigne artista Jesús de Perceval aseguraba que sus restos fueron enterradas en el claustro de la Catedral que fue cementerio, pero no hay constatación de dicha afirmación. Entre la información existente de lo destruido en la Catedral tras la Guerra se nombran las reliquias de San Valentín como desaparecidas.

 El 14 de febrero de 1965, en Almería se celebró una gran Fiesta en Honor a San Valentín y los Enamorados, recordando que aquí estuvieron los restos de  de un Santo Mártir “Valentin” que vino de Roma.  Radio Almería hizo una campaña donde los enamorados  a través de sus aportaciones ayudaron a  ejecutar un relieve dedicado a San Valentín mártir y peregrino. La radio igualmente realizó un concurso para los enamorados que se casaban sorteando con papeletas muebles para equipar la casa. También la loteria Nacional se celebró en el Teatro Cervantes y niñas ataviadas con el traje Regional regalaban claveles por todo el Paseo.

  Con dichas aportaciones y lo aportado por el Ayuntamiento, finalmente éste encargó realizar al  artista Jesús de Perceval, un bajorrelieve tallado en piedra de Alhama , policromado y dorado a modo de un mosaico bizantino. Un San Valentín joven de cuerpo entero en postura gallarda y al fondo del mismo aparece la Alcazaba y las casas y cuevas de la Chanca .
El bajorrelieve, se instaló en el Parque Nicolás Salmerón y después  desapareció, con posterioridad llegó a manos del galerista Trino Tortosa quien lo entregó al Ayuntamiento de Almería.

 Durante la Guerra Civil, los restos del cuerpo del mártir  desaparecieron y no se sabe donde fueron a parar.  Al parecer Jesús de Perceval comentó al  ya fallecido Canónigo Archivero de la Catedral D. Juan López Martín  que los restos fueron enterrados en el claustro de la Catedral que es bien sabido que allí había un cementerio, pero no está constatado.

Cuando se inauguró el monumento tras su recuperación en 2010, se colocó a su alrededor una verja para colocar candados. Dichos candados inspirados  en el libro de Federico Moccia y en los candados del Puente Milvio de Roma, son un recurso turístico para la ciudad porque  las personas que se acerquen  a esta plaza, pueden dejar su huella con la colocación de un candado y por otro lado los enamorados pueden sellar su amor  el día de Los Enamorados o cualquier otro día. La ubicación de la obra de Jesús de Perceval, es muy idónea, en la Plaza Campoamor (en pleno centro histórico) que hace referencia al poeta Ramón de Campoamor que también tuvo frases relevantes de amor como se muestra en la placa que aparece a los pies del monumental bajorrelieve.


     Candado que rodea la verja de San Valentin
                                          
                Maribel García Sánchez. Licenciada en Historia del Arte

miércoles, 1 de febrero de 2012

EL PATRIMONIO DE ALMERIA EN LA GUERRA CIVIL

Santuario de la Patrona Virgen del Mar tras su incendio.

    ALMERIA EN GUERRA: PATRIMONIO Y VIDA

    El Patrimonio Histórico-Artístico de Almería en la Guerra Civil Española (1936-1939) fue gravemente atacado, dejando en un estado ruinoso su aspecto monumental y artístico. Su riqueza artística,  principalmente eclesiástica, fue seriamente dañada, el monumento de la Catedral, con su singularidad característica de Catedral - Fortaleza quedó desprovisto de altares, imágenes y todo tipo de decoración. Afortunadamente el monumento estandarte de Almería: la Alcazaba, por suerte no resultó dañado en dicho período para continuar dominando y abrazando la ciudad y su puerto.

    Almería quedó sumida en un estado caótico  en lo referente a su patrimonio urbanístico y artístico. Numerosos edificios (tanto civiles como religiosos) de interés arquitectónico, quedaron en muy mal estado, debido por un lado a los sucesivos saqueos e incendios de que fueron objeto la mayoría de las iglesias y por el otro a los sucesivos bombardeos que sufrió la ciudad durante la contienda.

            En este sentido, hay que subrayar que en aquellas fechas, una gran parte del Patrimo­nio Histórico-Artístico de Almería, lo constituía los edificios religiosos: fachadas, estructura arquitectónica, imágenes, retablos y demás ornamentos que encerraban, quedaron en un estado de lamentable deterioro.  A partir de esa fecha el Patrimonio Histórico de la ciudad quedaría «herido de muerte» y con graves dificulta­des para recuperarse. Con posterioridad y a base de mucha constancia y perseverancia a lo largo de los años, la reconstrucción y restauración se hizo posible, aunque no «sería lo mismo» porque no era el auténtico y tradicional.  Aquel Patrimo­nio Histórico de la ciudad destruido o desparecido dejaría huérfanos al arte y la historia almeriense.

            El Gobierno de la República, organizaría unas Juntas de Protección del Tesoro Artístico que evitaron la destrucción de algunos objetos. De esta forma, según Emilio Orozco, en Almería, se pudieron recoger multitud de obras, no solo de los templos, sino también de  particulares cuyas casas fueron saqueadas. La cantidad de objetos acumulados en los almacenes-museos, según Orozco, era muestra del número de objetos desaparecidos a lo que añadía que serían las imágenes escultóricas las más dañadas.  Los lugares que fueron destinados a almacén y taller durante la contienda, fueron algunas dependencias de la catedral y del convento de las Puras. Igualmente en los últimos tiempos de la contienda, se trasladarían algunos objetos y cuadros al Museo Arqueológico, por temor a tener que cumplir las órdenes del Gobierno de Valencia que reclamaba el envío de las obras reunidas.  Asimismo algunos cuadros, tuvieron que ser recogidos, tras sufrir deterioros, siendo  restaurados con posterioridad a través de la Junta del Tesoro Artístico.

   En este sentido,  subrayar que  La Dirección General de Bellas Artes, a propuesta de la Junta Central del Tesoro Artístico y de conformidad con lo dispuesto en la orden ministerial del 5 de abril de 1937, nombró una Junta Delegada de Incautación y Protección del Tesoro Artístico en Almería y su provincia, que estaría integrada por el Consejero Provincial de Cultura, como Presidente; por D. Eugenio Serralbo Aguareles, del Cuerpo de Archivos; don Guillermo Langle Rubio, arquitecto municipal; don José Moncada Calvache, pintor y por d. Luis Querol Roso, catedrático de Geografía e historia del Instituto de Segunda Enseñanza de dicha capital, como vocales.

   En relación a las destrucciones del patrimonio de la ciudad, es fundamental destacar  que  una de las causas de los daños recibidos, fueron producidas por  los frecuentes bombardeos a los que se vió sometida , daños que se tradujeron en un buen número de victimas, así como en numerosos edificios que sufrieron graves destrozos, quedando algunos casi totalmente destruidos.

   Durante la Guerra Civil, la población almeriense vivió un periodo tenso y preocupante. Los efectos de los bombardeos, provocarían la necesidad de construir refugios para defensa de la población, convirtiéndose en el proyecto arquitectónico y de ingeniería más interesante realizado durante la contienda.  La situación de alarma constante en la población, provocaría la obligación de las autoridades municipales a tomar conciencia del problema, emprendiendo una red de refugios subterráneos en toda la trama urbana con objeto de velar por la seguridad de la ciudad y sus ciudadanos.

    En un primer momento, serían los vecinos quienes decidan tomar la iniciativa, comenzando a construir refugios en sus barrios, hasta que con la creación de la Comi­sión Mixta de Refugios, compuesta por representantes de todos los partidos con repre­sentación en el Ayuntamiento, se continuaría en la línea de construcción de refugios, comprando el cemento, contratando los obreros, realizando los planos y vigilando las obras.

            Finalmente , el proyecto de refugios contra los bombardeos efectuados en la ciudad de Almería, sería firmado por el arquitecto municipal Guillermo Langle, en febrero de 1937, junto con el ingeniero de Caminos José Fornieles y el de Minas, Carlos Fernández Celaya, consistiendo en la construcción de 4,5 kms. de galerías subterráneas con 67 accesos y con capacidad suficiente para albergar el mayor número de personas, y en especial niños, mujeres, ancianos y enfermos

    Pero de todos los bombardeos efectuados en Almería, sería el de la escuadra alemana del 31 de mayo de 1937 el que mayor impacto y destrozos ocasionó en la ciudad, teniendo una repercusión importante incluso fuera de nuestras fronteras. Las bombas de este terrible bombardeo ,  procedían de  los cañones de cinco barcos de la escuadra alemana de Hitler.

Hay que destacar que el ataque de la escuadra alemana respetó el monumento más representativo de la ciudad: La Alcazaba.

            En el bombardeo, 49 casas quedaron completamente destruidas, y más de cien sufrieron desperfectos de consideración. Un proyectil cayó en la Catedral y otro en la iglesia de San Sebastián. El ataque, empezó en la parte baja de la ciudad: puerto, pescadería, iglesia de San Roque, rambla de la Chanca, extendiéndose a toda la ciudad hasta llegar a la parte alta: Plaza de Toros, Cruz de Caravaca y aledaños del cemente­rio.

            Tras el brutal atentado cometido en Almería, la conciencia universal, manifestó su más enérgica protesta. La repercusión no solo fue a nivel nacional, sino también internacional. El nombre de Almería sonaba con intensidad, lamentablemente por los graves daños causados por el bombardeo.

     Guillermo Langle, realizaría el proyecto de refugios para la ciudad, estudiando la calidad del terreno, los kms. que deberían construirse y los costes que ocasionarían. Proyectándose 4563 m. de galerías con capacidad para 34.144 personas. Si tenemos en cuenta que Almería en aquella época contaba con aproximadamente 45.000 habitantes, supondría que nadie se quedaría sin poderse refugiar, ya que se añadían además otros lugares, que aunque no eran refugios propiamente dichos, si sirvieron para dicha función, caso de los subterráneos de los depósitos de mineral de hierro de la Cía. Andaluza de Minas, en el que cabían unas 3.000 personas,  la gran cueva existente en el barrio de Las Mellizas, con cabida para 5.000 0 6.000 personas, o las cuevas vivienda de Pescadería y otras habilitadas por los Comités de Barrio, con una capacidad total de 10 a 15.000 personas.

 En los tiempos que nos encontramos 2012, nuestro deseo es  que los españoles, y en este caso los almerienses, no vuelvan  a vivir el terror y el dolor que vivieron las personas que lamentablemente tuvieron que pasar durante una guerra insulsa entre propios hermanos de una misma nación: España,  y aunque hayan pasado muchos años, y las heridas vayan cicatrizando, este periodo bélico ha pasado a formar parte de la historia española. Pero aunque no se pueda pasar página porque la historia esta ahí y no la podemos cambiar, no busquemos culpables, intentemos que nunca se vuelva a repetir.


Maribel García Sánchez. Licenciada en Historia del Arte.

martes, 24 de enero de 2012

LA IGLESIA QUE FUE MEZQUITA: SAN JUAN

                       EL MIHRAB DE SAN JUAN: UN TESORO ARTÍSTICO

     La iglesia de San Juan, una joya arquitectónica e histórica que encierra una obra de arte: el mihrab, se ubicó en el lugar donde se encontraba la Mezquita Mayor y la primitiva Catedral de Almería desde 1492. La Mezquita, ordenada construir por Abderramán III coincidiendo con la fundación de la ciudad (La Medina) en el año 955(siglo X), comenzó su edificación ya en tiempos de Al-Hakam II en el 965.  La sala de oración, que en un principio comenzó siendo de tres naves, terminó ampliándose a 7. Constaba de dos partes: la sala de oración donde se encontraba el muro de la quibla y el nicho del mihrab y un patio porticado con abundantes especies vegetales y árboles frutales, destacando los naranjos y limoneros. En el centro del patio estaba la fuente de las abluciones, y en un extremo el alminar para llamar a la oración de los viernes. De este patio quedan solo los cimientos que se encuentran en el edificio de la actual Delegación de Defensa.  

   El terremoto de 1522 destruyó el edificio, pero al parecer no del todo porque se estuvo dando culto hasta 1551, año en el que se traslada a la actual Catedral-Fortaleza, comenzada a construir en 1525 a instancias del Obispo Fundador Fray Diego Fernández de Villalán, pasando a ser Parroquia de San Juan desde 1560 por decisión del obispo D. Antonio Corrionero. Desde ese momento, se suceden varias intervenciones, siendo el templo actual, edificado a principios del siglo XVII,  por mandato del obispo Fray Juan de Portoca­rre­ro.

   Su estado actual, aunque restaurado, es básicamente el del siglo XVII,  aunque sin la cubierta, que era un magnífico artesonado mudéjar, destruido a causa de un bombardeo en 1938, durante la Guerra Civil Española.

   La iglesia que tiene estructura a modo de cajón, posee en su interior una sola nave. El conjunto se cubre en su interior  por una bóveda de medio cañón acristalada que le da luz a la edificación. Al exterior presenta una cubierta a dos aguas. El muro meridional, conserva restos de la Mezquita Mayor: el muro de la Quibla y el nicho del Mihrab, descubiertos en 1930.

   Al exterior, la fachada principal presenta paramentos almohadillados de silla­res regulares, haciéndose éstos más acusados en la portada, que se organiza con un arco de medio punto flanqueado con medias columnas toscanas con fuste almohadi­llado. Su diseño manierista se observa en el frontón roto, del que sale el escudo del obispo Portocarrero.

         El nicho del mihrab que es la joya artística de San Juan,  se abre con un arco de medio punto que en su día tuvo que ser de herradura y en su interior, rehabilitado, nos encontramos con yeserías y arcos polilobulados propio de la época almohade. Su cubierta es una cúpula gallonada muy singular. En dicho mihrab (equivalente al altar cristiano) se colocaba el Libro del Corán .

   El Gobierno de la República mostró, desde sus comienzos, un gran interés por el Tesoro Artístico Español y se declararon gran número de monumentos españoles con valor Histórico-Artístico Nacional, como fue el caso de Almería.

     El mihrab de San Juan fue descubierto en 1930, y D. Leopoldo Torres Balbás en la
Junta del Tesoro Artístico, propuso su declaración de monumento Históri­co-Artístico. El 11 de marzo de 1934, el Ministro de Instrucción Pública y Bellas Artes acordó la declaración, quedando de esta forma adscrito al Tesoro Artístico Nacional desde ese momento. El mihrab fué declarado monumen­to His­tó­ri­co-Artístico por ser de gran importancia no sólo en Almería sino en toda la penín­sula, dada la escasez de restos de arte musulmán del siglo XII conservados en ésta. El monumento quedó bajo la tutela del Estado y bajo la inspección y vigilancia de la Comisión de Monumentos.

            Tras la declaración del mihrab como monumento Histórico-Artístico, se proce­dió a su conservación y reparación, que tuvo lugar en 1935 viniendo por dicho motivo de Madrid el Catedrático de la Dirección General de Bellas Artes e Inspector de la misma para Andalucía Oriental, D. Leopoldo Torres Balbas, que además de arquitecto era conservador de la Alhambra. Bajo su dirección se comenzaron los trabajos de desescombro para descubrir toda la obra, tomando también parte en la obra, el arquitecto provincial D. Antonio Zobarán.

       En la Guerra Civil, la referida iglesia fue saqueada e incendiada, reduciéndose a cenizas y quedando por fortuna en pie el interesante mihrab aunque con algunos daños sufridos en 1938. El artesonado mudéjar fue destruido en 1938 por unas bombas de aviación, quedando sólo algunos fragmentos . El templo tras el incendio, quedó en ruinas y sin techumbre convertido en un solar,

 Según la Orden de 25 de junio de 1941, se constituye La Junta Nacional para la Reconstrucción de Templos Parroquiales,  de acuerdo con el Decreto de 10 de marzo de 1941, con objeto de dar cumplimiento a lo dispuesto en dicho Decreto, sobre la extensión de los beneficios de la Ley de 23 de septiembre de 1939 a la reconstrucción de iglesias destruidas total o parcialmente como consecuencia de la Guerra Civil Española.  

          La iglesia de San Juan , a pesar de obtener subvenciones para su reconstrucción, no fueron lo suficiente, ya que en 1971, 32 años después de la Guerra Civil Española,  permanecía aún cerrada al culto, sin cubierta, casi olvidada y a punto de desaparecer por las construcciones inmediatas. La iglesia, que encerraba entre sus ruinas una parte importante de la historia de Almería, fue punto de mira de la Dirección General de Bellas Artes, que dispuso su consolidación y protección.

 Finalmente, tras un primer proyecto de reconstrucción, se abriría al culto definitivamente la iglesia de San Juan en 1979, pero sin una restauración integral.  Será ya  en 1991, cuando se lleve a cabo una actuación importante de restauración y consolidación de la iglesia, rehabilitándose el muro de la quibla y el nicho mihrab de la antigua Mezquita, dotando a la iglesia de una nueva cubierta, porque la anterior, de uralita, no era nada adecuada para la importancia histórica de una iglesia que se remonta a la fundación de la ciudad   y fué Mezquita Mayor  y primera Catedral , y lo más importante,  que alberga  su tesoro más preciado:  el nicho del mihrab, situado en el monumental muro de la quibla perteneciente a la antigua Mezquita Mayor.


MARIBEL GARCÍA SÁNCHEZ. LICENCIADA EN HISTORIA DEL ARTE.

miércoles, 18 de enero de 2012

LA ALCAZABA: EL BALUARTE DE ALMERÍA

Segundo Recinto de la Alcazaba de gran valor arqueológico, con el mirador de la Odalisca del Palacio de Almutasim
LA ALCAZABA DE ALMERIA Y SU SUPERVIENCIA

       La Alcazaba de Almería, experimentó a partir de los años 40 del siglo XX, sus primeras restauraciones. Aunque algunas se realizaron con mejor acierto que otras, no cabe duda que sus primeras obras de restauración, fueron de vital importancia para la supervivencia  del monumento señero de la ciudad,  de lo contrario, si hubiera continuado en el lamentable estado en el que se encontraba, estaba abocada a desaparecer. En la actualidad la Alcazaba de Almería, tras las últimas restauraciones de acondicionamiento de los jardines finalizadas a mediados 1990, y los trabajos de excavación experimentados en el segundo recinto de la Alcazaba, así como los espacios museísticos y de interpretación abiertos en algunas de sus edificaciones más representativas, la han convertido  en la fortaleza árabe más atractiva y visitada y de mayor extensión de Europa para orgullo de los almerienses y disfrute de los visitantes, colocándose a la cabeza de  los ejemplos de  arquitectura árabe existentes en España detrás de la Alhambra de Granada. El monumento principal que posee la ciudad de Almería, la ordena construir por Abderramán III en el año 955(siglo X) coincidiendo con la fundación de la ciudad (La Medina).

      Las causas de dicho estado se debían de una parte a los constantes terremotos que asolaron la ciudad a lo largo del tiempo, y por la otra, a la huella del hombre de la mano de expolios a los que  fue sometida y  la escasa concienciación por respetar nuestras raíces y en definitiva nuestro patrimonio histórico-artístico. Dichas restauraciones se pusieron en marcha tras finalizar la Guerra Civil Española, y como es sabido, la ciudad de Almería, sufrió durante la contienda constantes bombardeos, siendo el más trágico el producido el 31 de mayo de 1937 que dejaría una  ciudad en una situación caótica, con infinidad de viviendas burguesas del casco histórico semidestruidas.  En este sentido, hay que subrayar que la Alcazaba afortunadamente no resultó dañada por dicho bombardeo.

     El arquitecto Prieto Moreno y arquitecto conservador de la Alcazaba,  llevó a cabo las primeras visitas a la Alcazaba en los años 40, para su futura restauración, investigando y explorando antes de ejecutar el proyecto. Tras ejecutar las obras de remodelación del primer recinto, del cual se conserva de su construcción primitiva en la actualidad: aljibes del siglo XI, una fuente dedicada también para abluciones del siglo XII (excavada y descubierta en los años 90) y el pozo de una noria, comenzaría la restauración del segundo recinto. Hay que realzar el baluarte del Saliente, un magnífico mirador del primer recinto con unas vistas incomparables.

     Fue a mediados de los años 50 del siglo XX, tras concluirse la restauración del primer recinto, cuando se proyectó,  la restauración del segundo recinto, el más importante de los tres en lo que respecta a valor arqueológico, y donde se emplazaban las principales estancias residenciales reales, baños y otras construcciones anejas.  En la actualidad este recinto  se encuentran las dependencias del Palacio del Rey Almutasim. De la parte pública destacar: aljibes, ermita de San Juan (antes lugar donde se encontraba  la Mezquita), barrio de casas con calles, dos viviendas reconstruidas y los baños de la tropa. Y en la parte Privada se encontraba el Palacio del Rey Almutasim del siglo XI, del que queda el muro denominado “Mirador o Ventana de la Odalisca” que tiene una leyenda de amor entre la esclava favorita del Rey y un cautivo cristiano. También en esta parte privada se encuentran restos de la Casa de Gobierno y los baños privados del Rey y la Reina.

          Respecto a las primeras actuaciones de restauración del tercer recinto cristiano,  el arquitecto Prieto Moreno en el año 1944, presentó un ambicioso proyecto. El tercer recinto en la actualidad consta de un gran Patio de Armas con un aljibe central (oculto) y tres torreones: el principal del Homenaje con un arco conopial de finales del gótico y resto del escudo de los Reyes Católicos, la Torre de la Noria, hasta donde Almutasim subió el agua a la Alcazaba y la Torre de la Pólvora. Este recinto construido tras la toma de la ciudad por los Reyes Católicos en 1492, es un magnífico mirador del Puerto y el núcleo de la Medina.
  

       Las primeras reformas llevadas a cabo, comenzaban en la entrada a la fortificación, donde un empinado camino en zig-zag, llevaba hasta la Puerta o Torre de la Justicia. En la actualidad antes de ese camino empinado y llegar hasta la Puerta de la Justicia, a la fortaleza se accede por la Puerta de la Guardia y se llega a  la Torre de los Espejos que domina la entrada defensiva.  Traspasando la Torre de los Espejos, se llega a la Puerta de la Justicia de acceso  al primer  recinto, que según el arquitecto conservador su función principal fue la de acantonamiento de tropas y refugio de la población cuando la ciudad era atacada. En las excavaciones de los años 90 se ha descubierto que existió un barrio de viviendas, era una pequeña medina(ciudad). A este primer recinto, se le dotó de un sistema de plantaciones bajas para que en un futuro no ocultasen las almenas de las murallas.  Prieto Moreno ensalzaba  el  ajardinamiento practicado en el primer recinto definiéndolo como un “oasis de vegetación muy típica en los árabes”, con una variedad de especies subtropicales propias de la región, con el sonido del agua corriendo por canalillos y fuentes para reposar en los estanques. De esta forma, en los años 50, y una vez finalizada la restauración del primer recinto, el monumento estaba preparado para recibir al turismo nacional e internacional, que podría disfrutar de un espléndido mirador de la ciudad, su bahía y la vega. Un muro jalonado de torres, separaba este recinto del segundo sobre el que se alzaba la espadaña y campana de la vela. Pero este ajardinamiento estaba muy lejos de la típica huerta árabe y en los años 90 se restauró una gran parte de estos jardines, instalando un verdadero vergel árabe con plantas aromáticas y árboles frutales .

   Hay que subrayar que La Alcazaba le debe mucho a estos primeros proyectos de restauración realizados por Prieto Moreno. Si a primeros del siglo XX, era una edificación ruinosa y totalmente desprotegida, a partir de los años 50 empezaría a despertar de ese abandono y a lucir una fisonomía espléndida dominando la ciudad y la bahía, pero todavía queda mucho por hacer, los almerienses, somos los primeros que tenemos la obligación de conocerla,  respetarla y valorarla y la administración o administraciones competentes invertir más en acciones de excavación, formación y difusión. No olvidemos que su construcción forma parte de las raíces de nuestra querida ciudad, y por tanto su conservación  es tarea de todos.

 María Isabel García Sánchez. Licenciada en Historia del Arte.


   

    


    

domingo, 8 de enero de 2012

NUESTRA VIRGEN DEL MAR: PATRONA DE ALMERIA


LA VIRGEN DEL MAR EN EL SANTUARIO DEL MISMO NOMBRE



La Virgen del Mar Patrona de Almería ha sido hoy la protagonista de la Romería  Torregarcía que cierra las Fiestas de Navidad de Almería. Se expone al culto en la basílica de los Dominicos desde los primeros días de enero de 1503, tras ser encontrada en la orilla de la Playa de Torre García, frente a la torre vígia. La imagen luce en todo su esplendor en el camarin de la Virgen del Mar, ejecutado por el insigne artista de Almería Jesús de Perceval. Es la imagen más antigua de Almería, es una talla de madera de nogal con el niño en sus brazos de los siglos XIII al XIV. Una de las iglesias más representativas que posee Almería es la de su sede: el Santuario de la Virgen del Mar, regentada por los Padres Dominicos.

Mucho Patrimonio se destruyó en la Guerra Civil, la iglesia de los Dominicos fue incendiada y la imagen de la Virgen fue ocultada en el hueco de la escalera de la Familia Gallardo. Posteriormente volvió de nuevo a su Santuario. El Padre Ballarin fué el que trabajó para la reconstrucción, siendo los artífices en arquitectura el gran arquitecto Guillermo Langle y en decoración escultórica Perceval.

La Feria de Almería antes de su proclamación como Patrona en 1806, eran Fiestas Pre-Patronales. Nuestra Patrona es morenita de rostro como el Niño y sale tres veces majestuosa para que los almerienses y visitantes la vitoren y le rindan devoción: a principios de enero, después de los Reyes Magos, donde se desplaza hasta el lugar donde aparecio Torre García y en la Feria de Agosto que se celebra en su Honor, una vez finalizada la Feria al día siguiente la Patrona sale por las calles del centro de la ciudad. En la Feria, el último día que coincide en Sábado y es su Onomástica, la Virgen del Mar a las Puertas de su Santuario, se celebra una Ofrenda Floral, una vez realizada esa Ofrenda Floral a mediodía, durante todo el día la Virgen en su camarín del Altar Mayor puede ser visitada por sus fieles.

UNA IMAGEN SIN DUDA MUY IMPORTANTE PARA LOS ALMERIENSES, PORQUE ES SU PATRONA, QUE ARRASTRA UNA HISTORIA  DE GRAN TRADICIÓN Y ARRAIGO.